¿Sientes que la energía en tu equipo se apaga sin razón aparente?
¿Las reuniones están llenas de silencios incómodos y caras largas?
¿Notas que el compromiso ha bajado, pero no sabes qué hacer al respecto?
Hay una verdad universal: las personas no trabajan solo por dinero, sino por significado, reconocimiento y crecimiento. Sin embargo, muchos líderes siguen buscando la motivación en los lugares equivocados.
Este taller te ayudará a entender qué mueve a las personas, cómo potenciar su energía y compromiso, y qué hacer para crear un ambiente de trabajo donde todos quieran dar lo mejor de sí.
La gente trabaja por dinero, pero hace un esfuerzo adicional para obtener reconocimiento, elogios y recompensas.
Dale Carnegie
La gente trabaja por dinero, pero hace un esfuerzo adicional para obtener reconocimiento, elogios y recompensas.
Dale Carnegie
OBJETIVOS DE APRENDIZAJE
- Identificar los motores de la motivación y cómo aplicarlos en tu equipo.
- Descubrir qué impulsa el compromiso y qué lo destruye.
- Aprender herramientas prácticas para potenciar la motivación en el día a día.
AUDIENCIA
- Líderes y managers que buscan formas reales y sostenibles de motivar a sus equipos sin depender solo de incentivos económicos.
- Equipos que han perdido energía o compromiso, y necesitan reconectar con el propósito y la motivación interna.
- Responsables de RRHH o desarrollo organizacional que quieren fortalecer la cultura de reconocimiento y bienestar en la empresa.
- Profesionales en entornos de alta exigencia o desgaste, que necesitan mantener el impulso sin caer en el agotamiento.
- Personas que lideran desde la influencia (aunque no tengan un cargo formal) y quieren inspirar a otros con autenticidad.
Porque la motivación no se impone, se cultiva. Y cuando el equipo se enciende, no hay reto imposible.
Advertencia
Este curso puede provocar efectos secundarios como: ganas de trabajar, ideas compartidas, conversaciones reales y equipos que recuperan el brillo en la mirada. Dauxa no se hace responsable si, después de esta experiencia, ya no te conformas con liderar equipos apagados. La chispa ya está ahí. Solo hay que saber encenderla.